Malas perspectivas para final de año
Recomendamos a nuestros lectores no se pierdan el artículo que publicamos bajo el título «Automóviles: la atrevida ignorancia del presidente Sánchez», porque no tiene desperdicio.
Con la excusa de reducir la contaminación, uno de sus propósitos es subir los impuestos de tracción mecánica y matriculación a los coches de combustión y que sea el coche eléctrico quien domine la circulación en España. Pero bueno, mejor que lo lean, no tiene desperdicio.
Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en el mes de mayo han vuelto a las andadas. Los 125.625 vehículos matriculados significan una caída del 7,3% respecto al mismo periodo del año anterior y en el acumulado del año, las entregas de estos vehículos han caído el 5% hasta las 561.953 unidades.
Llama poderosamente la atención las ventas en el canal de particulares, que siguen cayendo por noveno mes consecutivo (-11,2%), por la incertidumbre que sienten a la hora de plantearse comprar un coche. Esta incertidumbre está provocando, como comentan los concesionarios, que una parte importante de los posibles compradores estén optando por coches de segunda mano de mucha antigüedad, lo que ha hecho que las ventas de vehículos de más de 20 años hayan subido casi el 8%, cuando lo que deberían es estar achatarrados.
Sólo el canal de empresas ha crecido en mayo y también en el acumulado del año, pero no es suficiente y las encuestas entre los profesionales del sector ya apuntan a que las cifras al terminar el año rondarán el millón doscientas mil unidades, una mala noticia que significa, además, que el parque automovilístico no se está renovando y sigue envejeciendo.
Raúl del Hoyo